AVISO PARA QUIEN QUIERA COMENTAR

¿Dónde está la sabiduría que perdimos en el conocimiento?
¿Dónde el conocimiento que perdimos en la información?
T. S. Eliot, Coros de La roca, I



viernes, 9 de abril de 2010

Identidad narrativa V. Una mujer con un pasado

"Prefiero a las mujeres con un pasado. Siempre son endiabladamente más entretenidas en la conversación", Oscar Wilde, El abanico de Lady Windermere.

Los aforismos de Wilde, espolvoreados con descarada premeditación en sus diálogos dramáticos serían verdad, si fuera verdad lo que Santiago Russiñol decía de la verdad: "Los que la buscan se merecen el castigo de encontrarla": algo insoportable, pero aquí con chocolate de cobertura para conseguir la bienhumorada ingestión burguesa.

Wilde dice la verdad al menos en lo de tener un pasado: sin un pasado narrable no puede haber una conversación presente "entretenida". Un hombre o una mujer suscitan un genuino interés, en la medida en que aparecen con los perfiles de su identidad más marcados, y conocemos esos perfiles narrativamente. 

De hecho, de alguien con una presencia que llama nuestra atención, esperamos inconscientemente una historia con argumento. La falta de correspondencia de la una con la otra produce decepción. (Vid. las declaraciones de las top-models en las revistas, o de los futbolistas en las ruedas de prensa. Sería como si el apuesto Eneas, al ser preguntado por la reina Dido sobre su identidad, en vez de narrar sus vicisitudes anudadas a un arcano designio divino, le espetara: "Quicir: hemos navegao, hemos naufragao; a ver cómo se presenta el derbi del sábado"). 

II

En la buena literatura y el buen cine, un guión consistente es un ingrediente necesario para el diálogo valioso con el lector. Creo que la comunicación pública -novelas, películas y medios de comunicación-, ese lugar donde se forja en buena medida nuestra identidad contemporánea, necesita hombres y mujeres "con un pasado", con una historia humanamente consistente, que propongan historias que hagan "entretenida" la conversación presente abierta al futuro en que consiste nuestra vida, tan aquejada del tedio de lo instantáneo. 

Cambiar la cobertura por chocolate puro. De verdad.

Para comunicación pública, imprescindible el blog de J. J. García-Noblejas.