AVISO PARA QUIEN QUIERA COMENTAR

¿Dónde está la sabiduría que perdimos en el conocimiento?
¿Dónde el conocimiento que perdimos en la información?
T. S. Eliot, Coros de La roca, I



viernes, 22 de octubre de 2010

Leyendo el tatuaje de Lady Gaga

Jaime Nubiola me envía algo muy curioso: una imagen del tatuaje que lleva Lady Gaga en el brazo izquierdo. Curioso porque el tatuaje reproduce un fragmento de las Cartas a un joven poeta, de Rilke, grafiado en un floreado alemán.






Traducido es:
Descubra el fundamento que lo lleva a escribir; investigue si tiene raíces en el lugar mas profundo de su corazón; reconozca si para usted sería necesaria la muerte en caso de ser privado de escribir. Esto ante todo: pregúntese en la hora mas callada de la noche: ¿debo escribir?
De entrada descubro en el texto esa necesidad de la pasión que es habitual en el artista. La voluntad y autodeterminación necesarias para crear. También la faceta neorromántica de Rilke, y de tantos artistas actuales para los que el ciclo romántico todavía no ha terminado. Y esa excursión hacia el "fundamento", tan moderna, mostrado en el contexto de "raíces", "profundo", "corazón", "muerte", "hora más callada de la noche". 

Nubiola, en un jugoso artículo, se apoya en C. S. Peirce para indicar que: 
 ...en nuestra actividad investigadora nos encontramos andando sobre un barrizal, en el que caeremos si en lugar de seguir hacia delante nos detenemos en busca de un asidero firme e inconmovible.
Lo cito porque quiero aplicar esa idea aquí: un rasgo de buena postmodernidad -momento que en muchos aspectos es un barrizal- será corregir ese buceo en la inmanencia del yo como camino del éxito, ese legado de la modernidad romántica, con su estatismo y su incomunicabilidad; y abrir el arte a una comunicación con el otro, mientras no se deja de caminar atendiendo razonablemente tanto a las necesidades de la vida cotidiana, como a la propia interioridad y a lo permanente (que se puede llamar lo metafísico). 

Seguramente el consejo le vino muy bien al joven poeta. Pero creo que hoy hace falta un arte decididamente razonable, sin dejar a un lado la pasión, que no la inventó la modernidad romántica, y ya la reivindicaba nuestro buen Platón. 


Quizás llevar tatuadas estas cosas, como la Srta. Gaga, ayude a no olvidarlas. Yo, la verdad es que prefiero que me las recuerde mi pda, o las personas con quienes intento ser razonable.