I.
Se trata de un texto muy conocido en el ámbito anglosajón, que ha sido traducido al castellano al menos tres veces. Esta es la cuarta. Y he querido proponer su lectura desde la escritura creativa, por eso, además del aparato de edición que contextualiza el texto, he añadido un ensayo mío que responde a la pregunta ¿Puede El arte de la ficción decir algo interesante hoy a docentes, alumnos y practicantes de la escritura creativa?
II.
Como pórtico a esta edición cito una frase de Aristóteles (Ética a Nicómaco, libro II, 1103 a, 32-33), que se ha convertido en un verdadero mantra para mí, como escritor y como profesor de escritura creativa:
… para saber lo que debemos hacer, hemos de hacer lo que queremos saber…
Creo que James estaría de acuerdo con esta convicción del filósofo, pues en las páginas de El arte de la ficción aparece una y otra vez una apasionada reivindicación -aunque dentro del decoro anglosajón, of course- de lo que se aprende por experiencia, de la sabiduría práctica, de la confianza, la frónesis, el riesgo, el oficio. Ideas y palabras fertilizantes en estos tiempos de autoedición constante de la identidad, de simulacro, de inmediatez, de recetarios...
III.
IV.
Espero que su lectura sea una experiencia "inspiring", como dicen los norteamericanos.